AntelSat demostró capacidad tecnológica del Uruguay

El satélite AntelSat dejó de transmitir datos durante el mes de abril, según un comunicado de Facultad de Ingeniería. El proyecto cumplió “plenamente con sus objetivos” y contribuyó a la formación de más de 60 profesionales, señala el texto.

La primera aventura uruguaya en el espacio culminó el pasado 18 de abril, fecha en que se estableció la última comunicación con el satélite experimental AntelSat. Creado conjuntamente por la FING-UDELAR y Antel, el satélite culminó su operación “de forma previsible, a causa de la degradación esperable de sus componentes”. Permaneció 10 meses en órbita y realizó 4444 giros alrededor del planeta.

“AntelSat demostró la capacidad tecnológica y de innovación existente en el Uruguay”, explica FING en el comunicado de prensa. Asimismo, resalta que el satélite fue considerado desde el inicio como un proyecto educativo y que ha contribuido a la formación de más de 60 ingenieros y otros profesionales en disciplinas como electrónica, telecomunicaciones, informática, energía y diseño mecánico.

La historia detrás de AntelSat

El desafío de diseñar un satélite uruguayo surgió en 2006, cuando un grupo de docentes del Instituto de Ingeniería Eléctrica (FING) consideró que el proyecto era “especialmente adecuado para contribuir a la formación y motivación de los futuros ingenieros”.

Los primeros experimentos se realizaron entre 2008 y 2010 con el apoyo de la FJR y consistieron en la puesta en órbita de cuatro globos sonda. En tanto, docentes y estudiantes de FING trabajaron en el desarrollo de las diversas partes del AntelSat en el marco de sus trabajos de fin de carrera.

El apoyo de Antel comenzó a tomar forma en Ingeniería deMuestra 2010 (un evento organizado por FING y FJR), cuando Carolina Cosse, entonces presidenta del ente, conoció el proyecto. A partir de 2011 Antel brindó una colaboración clave con la financiación y la puesta a punto de la carga científica del satélite. Por su parte, los técnicos de FING se enfocaron en la llamada “aviónica” del dispositivo (sistemas que lo controlan y lo hacen funcionar).

Un esperado despegue

El lanzamiento al espacio de AntelSat se realizó el 19 de junio de 2014 desde la base rusa Yasny. “Los posteriores 10 meses de operación permitieron demostrar el correcto desempeño de gran parte de los sistemas del satélite, de los procedimientos y de las instalaciones en las estaciones terrenas”, detalla el texto.

Desde su puesta en órbita, el satélite reportó medidas periódicas del campo magnético terrestre empleando magnetómetros y evaluando la posición del sol mediante una serie de fotosensores. Emitió alrededor de 750 mil transmisiones que fueron recibidas por radioaficionados de todo el mundo.

Los investigadores de FING trabajan ahora en el análisis de las 480 mil medidas y datos generados por el satélite, además de las 70 imágenes tomadas por sus cámaras.

Cómo era AntelSat

El satélite uruguayo medía 10 x 10 x 20 centímetros y pesaba 1,7 kilogramos. Contaba con dos cámaras, una que sacaba fotos a color y otra infrarroja. Esta última podía medir la altura y los tipos de nubes, la temperatura terrestre y del agua. Combinadas, las cámaras hacían posible la detección y el estudio de tormentas o ciclones tropicales, por ejemplo.